el o la, le o lo

Rellenar los espacios en blanco.

Rellena el ejercicio (el espacio en blanco) y luego haz clic en el botón de verificar para comprobar tu respuesta. Cliqueando en [?] o en Ayuda se te ofrecerá una pista. Fíjate que el uso de la ayuda te hará perder puntos.

perro y retrato

En barrio de Santa Cruz de Sevilla vivía no hace muchos años un joven pintor que había conseguido cierto renombre como retratista.
Un día llegó a su estudio una señora con muchos humos para encargar un retrato.

Al joven pintor hizo mucha ilusión encargo. Tardó exactamente tres semanas en finalizar obra.

día que señora fue a recoger retrato iba acompañada de un pequinés viejito que casi no veía nada. Cuando retratista levantó tela que cubría pintura, señora no pudo ocultar su desilusión. cuadro no gustó nada.

- Me ha puesto usted años de más - dijo al pintor muy desilusionada -. ¿No ve que mi perrito no me ha reconocido? ¡Mire, no se ha movido de su sitio! Si no mejora usted retrato no puedo aceptar.

Efectivamente: perro miraba cuadro con indiferencia.

¡Cómo iba a reconocer a su dueña un perro tan viejo y tan miope! pensó pintor.

No quiso cambiar nada. Durante varios días estuvo pensando qué hacer. Al cabo de dos semanas llamó otra vez a señora.

Ella se presentó de nuevo en estudio, acompañada de su fiel pequinés. Nada más entrar en habitación, perro comenzó a ladrar y echó a correr hacia retrato moviendo cola alegremente. Con lengua se puso a lamer los pies del retrato de su ama.

No puede negar que esta vez sí que ha reconocido - dijo satisfecho pintor.
señora no tuvo más remedio que pagar cuadro y llevárse. Unos días más tarde pintor estaba contando ocurrido a un grupo de amigos.

- ¿Cómo es posible? ¿cómo conseguiste?

- Muy sencillo. único que hice fue ...